martes, 6 de abril de 2010

MANIFIESTO CONTRA LA VIOLENCIA DE GÉNERO

05/04/2010 EN MEMORIA DE LAS VÍCTIMAS POR VIOLENCIA DE GÉNERO
Un lunes más la violencia machista nos arrastra a este rincón de nuestra ciudad, un lunes más la violencia de género es el titular y una mujer la víctima.
La violencia machista tiene muchas caras y muchas formas y se muestra como la más brutal de las desigualdades que existen y que soporta nuestra sociedad.
Es por ello queremos aprovechar esta ocasión para lanzar varios mensajes:
*El primero, para las instituciones, asociaciones y colectivos que trabajan por, y para, la eliminación de la violencia que se ejerce contra las mujeres; para que no desistan en su empeño de conseguir una sociedad que progresa y avanza. Gracias a la aprobación de la Ley Integral contra la violencia de género contamos con más recursos para hacer frente a esta lacra; por ello queremos pedir a las y los profesionales, que trabajan directamente con mujeres víctimas de violencia machista, que se formen e impliquen para poder proporcionarlas la mejor atención en los momentos difíciles.
Las instituciones tienen capacidad, y además es su deber, de intervenir desde distintos ámbitos de la sociedad como son: la educación, la justicia, la sanidad, la convivencia y todos ellos, son fundamentales para afrontar la violencia que sufren las mujeres y para su eliminación.
*El segundo mensaje va dirigido a las mujeres que sufren violencia cada día, para que tengan presente que cada vez son más las que dan el difícil paso de denunciar su situación y que ya no es un problema que tengan que esconder, porque no están solas, sino que existen recursos que garantizan su protección y amparo; del mismo modo, y una vez planteada la denuncia, jamás se debe bajar la guardia, porque el mayor error que puede cometer una mujer maltratada es volver a confiar en quien le hace sufrir.
*El tercer mensaje queremos enviarlo a la sociedad. La lucha contra la violencia de género es una batalla que debemos ganar entre todas y todos, empezando por el vecino o vecina que escucha a través de la pared, pasando por la profesora que trabaja educando en los valores de igualdad entre sus alumnas y alumnos, por los agentes sociales que promueven políticas no discriminatorias en las empresas o los padres y madres que transmiten valores de igualdad y respeto a sus hijas e hijos.
De la ciudadanía depende, en mayor medida, la solución a este problema social y está en manos de ella el poder erradicar esta injusticia a través de la concienciación de hombres y mujeres. Porque quién sabe si mañana tu hermana, tu compañera de trabajo, tu hija o tu vecina será una de las mujeres que engrose la lista de víctimas de violencia machista.
De nada sirve pasar de largo, mirar hacia otro lado o hacer oídos sordos, el problema está ahí y debemos hacerle frente entre los hombres y mujeres que creemos en una sociedad más justa, más igualitaria.
El último mensaje es para quienes maltratan, para que sepan que cada vez somos más las personas que rechazamos con firmeza cualquier tipo de violencia hacia las mujeres. Deben saber que la única ley existente es la que protege a la víctima y aísla al maltratador.
Que yo, como mujer, decido cuándo salgo, cómo me visto, mis amistades y con quién comparto mi vida y que por mucho que me insultes, me humilles, me agredas o me amenaces, nunca, nunca seré de tu propiedad.
Contra la violencia machista, tolerancia cero.